Hoy, me he dado cuenta de lo mal repartido que está el mundo... He visto unas fotos de un niño en el cuerno de África, con unos ojos que nunca había visto, tan angustiados, tan asustados... se me ha roto el corazón al ver toda la misería y lo mal que lo están pasando.
¿Cómo es capaz la gente de seguir con su rutina y no ayudar a estas personas?
No estoy diciendo que dejen su vida y se vayan hasta África a apoyarles, pero sí que le envíen una ayuda económica, y sí ya sé que estamos en crisis, pero diós mío cuánta arrogancia hay, ¿estamos en crisis, no? Entonces, por qué todas las tardes se siguen llenando los bares de mi pueblo, o la mayoría de la gente sigue yendo de vacaciones... por qué todas las chicas siguen estando a la moda, por qué por qué por qué... Tantas mentirsas y tanto egoísmo no tiene que ser bueno.
Ahora mismo lo que más me gustaría es poder hablar con estas personas que necesitan tanta ayuda, poder decirles: "No os preocupeís, no estáis solos, sé que es duro, pero por favor sed fuertes" sé que no serviría de mucho, pero por lo menos espero que les ayudará a tener esperanza, y digo esperanza y no fé porque según el diccionario fé es: en la terminología religiosa, "el asentimiento firme de la voluntad a una verdad basada sola y únicamente en la revelación divina"o también puede ser: "la adhesión del entendimiento a una verdad por la autoridad de un testimonio, ¿ Qué mal no? A mi no me gusta ni un poquito, sin embargo ESPERANZA lo define como: Es el sentimiento que se experimenta, cuando las cosas van mal, al tener un presentimiento de que las cosas mejoraran o iran mejor, en un tiempo no determinado antes de que el acontecimiento ocurra. El color de la esperanza es el color verde. Qué bonito, por eso yo creo que siempre hay que tener pues eso, esperanza, pues sera lo que te mantendrá vivo en los peores momentos, cuando pienses: Qué paren el mundo que yo me bajo. dirás bueno, quizás sea una mala racha, quién dice que mañana no vaya a pasar algo especial? Pues los mejores momentos, son aquellos que ocurren sin planearlos, ni tampoco predecirlos. ¿Quién iba a predecir hace unos 50 años que un hombre negro sería el presidente de EEUU? Practicamente nadie, pero ocurre, por eso siempre hay que pensar: Vaya, al fin y al cabo las cosas, tampoco están tan mal. Ánimo África, estamos contigo, de corazón.